Por Jesús Tahiri Becario Predoctoral de la Facultad de Derecho de la Universidad de Zaragoza (España)

Debido al aumento exponencial de la potencia informática y al potencial de la inteligencia artificial conexionista, la investigación y el desarrollo en el campo de las neurotecnologías ha llegado a un punto crucial en el que debemos reflexionar seriamente sobre las implicaciones legales que plantean estas herramientas.
Algunos académicos, como el profesor Farahany, defienden la necesidad de crear nuevos derechos para proteger nuestras mentes de interferencias arbitrarias y manipulación cognitiva. Hablan de garantizar la libertad cognitiva y preservar la privacidad mental. Pero, ¿es esto realmente necesario o nuestro sistema legal tiene suficientes "escudos" para proteger nuestra privacidad mental frente a terceros? En los siguientes párrafos examinaremos brevemente la situación española a este respecto.